A las 7 de la tarde de cada 9 de Mayo se emite en Rusia el Minuto de Silencio en honor de los caídos en la Gran Guerra Patria.
Una traducción al castellano después del vídeo.
¡Atención, atención, habla Moscú. Emiten todos los canales centrales de la TV y las mayores radioemisoras de Rusia. Escuchen este mensaje desde Moscú!
Que los nombres de los caídos resplandezcan con la luz de la memoria agradecida, con la luz de nuestro amor y de nuestro dolor.
Recordemos los tres años, los diez meses y los dieciocho días además. Veintiséis millones y cuatrocientas cincuenta y dos mil vidas se cobró la Gran Guerra Patria en nuestro país.
Recordemos, recordemos a quienes combatieron al enemigo en el frente, a quienes lucharon en los destacamentos guerrilleros, a quienes sufrieron en los campos de concentración fascistas.
Recordemos a aquellos que trabajaban en la retaguardia sin descanso, sin escatimar las horas del sueño. Recordemos a los que llegaron hasta Berlín y Praga, a quienes no están hoy con nosotros.
Recordemos las aldeas devoradas por las llamas, los poblados borrados de la faz de la tierra.
Recordemos a los cientos de ciudades destruidas pero no conquistadas, recordemos cada calle, cada casa.
Soldado de la Gran Guerra Patria: tú combatiste hasta la última gota de sangre en las afueras de Moscú y en Stalingrado. Llevaste el pan hasta Leningrado bloqueado, ardiste en un tanque en los alrededores de Prójorovka. No temiste perecer para salvar millones de vidas. Tú, que perdiste a familiares y a seres queridos en los campos de Stalin llevaste la libertad a los prisioneros de Auschwitz, Buchenwald y Dahau. Tú no invadiste territorios ajenos, no buscabas la gloria. Tú defendías la Patria, defendías tu familia.
Recordemos a aquellos que ofrendaron su vida en el altar de la Patria: hagamos una profunda reverencia para ellos.
Pasan los años, las décadas, se suceden las generaciones, pero acaso es posible entregar al olvido la hazaña de los soldados que no solo defendieron nuestra vida, sino que además el nombre mismo del ser humano que quiso pisotear el fascismo. En el día de la Gran Victoria inclinemos la cabeza ante el recuerdo preclaro de los hijos, las hijas, los padres, las madres, los abuelos, los esposos, las esposas, los hermanos, las hermanas, los compañeros del pelotón, los amigos que no regresaron de la guerra…
Sobreviene el minuto de silencio.
Memoria eterna para las víctimas de la Gran Guerra Patria. Gloria eterna para los héroes que cayeron por la libertad y la independencia de nuestra Patria.