Dejo el artículo de la wikipedia sobre ella: http://es.wikipedia.org/wiki/Bela_Ajmad%C3%BAlina
Algunos poemas:Bela (Isabella) Ajátovna Ajmadúlina (ruso: Белла (Изабелла) Ахатовна Ахмадулина; Moscú, 10 de abril de 1937 - 29 de noviembre de 2010) fue una destacada poeta y traductora rusa moderna. Según Joseph Brodsky, fue la mejor poeta viva en ruso.[1] [2]
Contenido
[ocultar]
* 1 Biografía
* 2 Obra
* 3 Premios
* 4 Enlaces externos
* 5 Notas
* 6 Bibliografía
[editar] Biografía
Fue la única hija de un padre tártaro y una madre ruso-italiana. Comenzó escribir versos en su infancia. Inició su carrera literaria durante su época estudiantil, colaborando como periodista en el periódico moscovita Metrostróevets, al mismo tiempo que desarrollaba sus aptitudes poéticas en el círculo del poeta Yevgeni Vinokurov. Publicó sus primeros poemas en 1954. Se graduó en el Instituto Literario (Moscú) en 1960.[3]
Se casó en tres ocasiones: con el poeta Yevgeni Yevtushenko en 1954, con Yuri Nagibin, en 1960, y con el famoso artista ruso Borís Messerer, en 1970.[3]
[editar] Obra
Su poesía lírica es lo mejor de su obra. Se caracteriza por su intenso lirismo, refinamiento formal e intercomunicación con la tradición poética del pasado.
En la evolución poética de Ajmadúlina pueden distinguirse tres épocas:
1. En su primera etapa, que va desde 1955 a 1963, destaca su libro La cuerda (Струна, 1962), en el que destaca el poema "Mi genealogía" (Моя родословная).
2. La segunda época va de 1963 a 1979. Publica varios libros de poemas: Escalofrío (Озноб, Fráncfort, 1968), Lecciónes de musica (Уроки музыки, 1969), Versos (Стихи, 1975), La vela (Свеча, 1977), Sueños de Georgia (Сны о Грузии, 1977, 1979), Ventisca (Метель, 1977); y prosa publicada en la miscelánea literaria “MetrOpol” (Muchos perros y un perro (Много собак и собака, 1980))
3. Su tercera etapa poética (desde 1979 hasta el presente) incluyendo los libros de poemas Misterio (Тайна, 1983), El jardín (Сад, 1987) (Premio Estatal de la URSS, 1989), Versos (Стихотворения, 1988), Obras escogidas (Избранное, 1988), Versos (Стихи, 1988), Litoral (Побережье, 1991), Cofrecito y clave (Ларец и ключ, 1994), Ruido de silencio (Шум тишины, Jerusalén, 1995), Fila de piedras (Гряда камней, 1995), Justamente mis versos (Самые мои стихи, 1995), El sonido mostrador (Звук указующий, 1995), Un día de diciembre (Однажды в декабре, 1996), Contemplación de bolita de vidrio (Созерцание стеклянного шарика, 1997), Obras completas en tres volumenes (Собрание сочинений в трех томах, 1997), Instante de existencia (Миг бытия, 1997), Lo imprevisto (Нечаяние, versos y diario, 1996-1999), Al lado de árbol de Año Nuevo (Возле елки, 1999), Rasgos hermosos de mis amigos (Друзей моих прекрасные черты, 2000), Versos. Ensayos (Стихотворения. Эссе, 2000), Espejo. Siglo XX (Зеркало. ХХ век - versos, poemas, traducciones, cuentos, ensayos, discursos, 2000).
Escribió ensayos sobre Vladimir Nabokov, Anna Ajmátova, Marina Tsvetáyeva, Venedikt Yeroféyev, Aleksandr Tvardovski, Pável Antokolski, Vladímir Vysotski y otros artistas.
Tradujo a muchos poetas clásicos y modernos de la ex-URSS (georgianos, armenios, abjasios), y también a poetas europeos y estadounidenses (de idiomas como el inglés, el francés, el italiano, el polaco, el checo y el serbio). Sus traducciones han sido muy elogiadas.
La poesia de Ajmadúlina es bien conocida en el mundo entero. Sus libros han sido traducidos a muchas lenguas, entre ellas el inglés (Fever and Other New Poems, Nueva York, 1969; The Garden, Nueva York, 1990), el alemán (Musikstunden, Berlín, 1974; Das Gerausch des Verlusts, Leipzig, 1995), el italiano (Tenerezza, Parma, 1971; Poesie scelte, Roma, 1993; Poesie, Milano, Spiralli, 1998), el francés, el serbio, el checo, el eslovaco, el polaco, el hebreo, el búlgaro, el danés, el letón, el estonio, el georgiano, el armenio, el moldavo, el rumano, el kurdo, el árabe y el japonés.
En 1977 Bella Ajmadúlina fue elegida miembro honorario de la Academia Estadounidense de las Artes y las Letras.
[editar] Premios
* Premio Estatal de la URSS (1989)
* Nosside (Italia, 1994)
* Premio "Triunfo" (Rusia, 1994)
* Pushkin Prize of the Alfred Toepfer Foundation (1994)
* Premio Brianza (Italia, 1998)
* Premio Presidencial (Rusia, 1998)
* Premio Bulat Okudzhava (Rusia, 2003)
* Premio Estatal de Rusia (2004).
Ha sido galardonada con tres órdenes estatales de Rusia por sus servicios a la patria y a las relaciones internacionales en la esfera de la literatura y la cultura (propietaria de la orden «Por los servicios a la patria» de segunda y tercera clase).
.
En qué me diferencio
de la mujer con la flor
o de la muchacha que ríe
y juega al anillo.
¿Y el anillito no llega hasta sus manos?
Me distingo de la habitación con el empapelado,
donde estoy sentada sobre el final del día
y la mujer con los puños de cibelina
aparta de mí su mirada arrogante.
Cómo compadezco su mirada altiva,
y temo, temo espantarla,
cuando ella se inclina
sobre el cenicero de cobre
para sacudir la ceniza.
¡Oh, Diós mío!
Cómo le compadezco,
su hombro, su hombro deprimido,
y su cuello blanquito y fino,
que siente calor bajo las pieles.
Y temo que de repente comience a llorar,
que sus labios griten terriblemente,
que esconda las manos en las mangas
y que las perlas golpeen el suelo...
.
.
.
1950
INVIERNO
Este gesto del invierno hacía mí,
frío y aplicado.
Sí, hay algo en el invierno
de la medicina tierna.
De otro modo, cómo de repente,
de la oscuridad y el tormento,
la enfermedad confiada
le dirige sus manos.
Oh amable, seguí con tu brujería,
de nuevo rozará mi frente
el beso santo del anillo helado.
Y es cada vez más fuerte la tentación
de encontrar el engaño con la confianza,
mirarle los ojos a los perros,
abrazar los árboles,
perdonar como jugando,
y habiendo perdonado
perdonar todavía a alguien,
confundirse con el día invernal,
con su óvalo vacío,
ser siempre para el
su matiz pequeño.
Reducirse a no existir,
para implorar detrás de las paredes
no una sombra mía sino la luz,
por mí tapada.
1961
Traducción: Natalia Litvinova
(Fuente: http://animalesenbruto.blogspot.com/201 ... ulina.html)
Un cuento sobre la lluvia
Desde la mañana la lluvia no me abandonaba,
-Oh, déjame- le decía yo groseramente.
Pero ella no cedía, fiel y triste,
me seguía como una pequeña hija.
La lluvia se pegó a mis espaldas, como un ala.
Yo la retaba
-Avergüénzate, mala!
Llorando te implora el quintero
-Vete a las legumbres y a las flores!
¿Qué quieres de mí?
El tiempo era pesado y seco.
La lluvia estaba conmigo, olvidando
al resto del mundo.
Los chicos bailaban en torno a mí,
como si fuera una máquina regadora.
Me ingenié para entrar en un café,
Me escondí en una mesa, detrás de un nicho.
La lluvia, cual un mendigo, se pegó a la ventana,
y quería llegar a mí a través del vidrio.
Salí otra vez, la mejilla fue castigada
con una bofetada húmeda,
pero en seguida, arrepentida,
la lluvia, triste y valerosa,
me lavó los labios con olor a cachorro.
Creo que mi apariencia era ridícula.
Me envolví el cuello con un pañuelo gris.
Y la lluvia me pellizcaba la oreja.
La sequía era tensa. Todo estaba seco.
Sólo yo me empapé.
Traducción: Irina Astrau
La Noche
A Andréi Smirnov
El alba oscurece por tres puntos
y temerosa la mano no se atreve
a irrumpir en la blancura del papel
cortando el aire denso que lo guarda.
Como sin remedio mi razón es honesta
se avergüenza de su imperfección
y no deja a la mano alcanzar la dicha
de tramar yambos con el descuido de ayer.
Mientras está plena de signos la penumbra
una idea imprecisa que hace arder mi frente,
el poder del café o la pasión nocturna
se pueden confundir con chispas
de la inteligencia.
Pero, en realidad, como grande es mi juicio
está a salvo de las locuras de estas vigilias,
pues esta ardiente excitación, como un genio,
méritos suyos no las considera.
¡Acaso es pecado desconocer mi infortunio!
Es tan inocente la pequeñez, tan dulce
la tentación de violar el anonimato
de esta noche,
nombrando todo lo que me rodea
por su nombre.
En tanto ordeno a mi mano no moverse
cada objeto me observa provocativo,
resplandece y vigila cada gesto mío
que insinúe le rinde pleitesía.
Seguro de que los amo
los objetos gruñen y mendigan,
anhelando con toda el alma
sea mi voz la que los cante.
¡Qué agradecida estoy a la vela,
quisiera hablar de su amada luz
y concederle la incansable caricia
de los epítetos! Pero, callo otra vez.
¡Qué dolor y tormento el de estar muda,
sin confesar ni con una palabra
toda la belleza que el amor
con mi pupila severa contempla!
¿De qué me avergüenzo?
¿Por qué no soy libre en la casa desierta,
bajo la nieve creciendo para escribir mal,
pero con justeza,
sobre la casa, la noche y el cielo azul
tras la ventana?
¡No quiera Dios que pierda la vergüenza
ante la hoja de papel tan indefensa
ante la vela sencilla y luminosa
ante mi rostro esfumándose en el sueño!
La traición
Me traicionan. Me traicionaron. Y después
me olvidan. Yo misma soy culpable.
Y tengo que admitir con mi razón rendida
que me estoy volviendo loca, volviendo loca.
Y si están vendiendo las naranjas
y huele a naranjas todo el cesto,
entonces me parece que a mí me venden,
a mí me venden, no a las naranjas.
Cuando los padres echan al olvido
a sus propios hijos para distraerse,
pues me parece que a mí me traicionan,
a mí me traicionan no a sus hijos.
Y cuando a ninguna cosa le dan valor,
engañan, mienten, andan con los chismes,
pues me parece que a mí me traicionan,
me venden y me traicionan.
Fuente: http://poetassigloveintiuno.blogspot.com
Un viejo video en el que Ajmadúlina recita sus poemas:

