Mijail Gorbachov: doy mi apoyo a Putin

Discusión sobre política y temas sociales.

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Vladiвосток
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Mijail Gorbachov: doy mi apoyo a Putin

Mensaje por Vladiвосток »

La Agencia Ria Novosti publicó ayer la siguiente noticia:

NEZAVISIMAYA GACETA. Esta semana se cumplen 15 años desde los acontecimientos de agosto de 1991, cuando los miembros del llamado GKChP (Comité Estatal para la Situación de Emergencia) intentaron dar un golpe de Estado.

"Nezavisimaya Gaceta" publica fragmentos de una charla sostenida por su corresponsal con el primero y el último presidente de la URSS, Mijail Gorbachev, participante directo de aquellos acontecimientos.

- ¿Cuáles son las enseñanzas del putch?
- Por medio de realizar golpes de Estado, cometer abusos y usurpar el poder no se construye la democracia. El actual presidente de Rusia aplica una línea dirigida a afirmar la economía de mercado y fortalecer la democracia en interés de la mayoría. Precisamente por ello doy mi apoyo a Putin.

- En una reciente publicación usted critica mordazmente unas enmiendas aprobadas por la Duma de Estado, que se prevé introducir en la legislación electoral, y acusa a una "parte de la élite política" de aspirar a limitar la participación de los ciudadanos en los asuntos del Estado. ¿A quién se refería usted?
- En primer lugar, a Rusia Unida.

- En la Historia de la nueva Rusia, el cambio del dirigente siempre significaba un cambio radical del rumbo. Putin en más de una ocasión ha señalado que abandonará el puesto de presidente en 2008. ¿Existen fundamentos para temer que después de 2008 nos espere un nuevo cambio del rumbo de 180 grados?
- Precisamente por ello digo que nos hace falta un sistema electoral que proteja al país de tan indeseable perspectiva.

- ¿Ve usted dentro de la élite política rusa a una persona capaz de encabezar el país en 2008?
- Tiene que ser una persona madura. Creo que es importante saber a quién va a indicar el presidente. Mas ello no quiere decir que el elegido por Putin no pueda tener rivales.

- ¿Mijail Kasianov, por ejemplo?
- No, Kasianov no tiene perspectivas.

- Remontémonos a los acontecimientos de hace 15 años. A finales de julio, poco antes de dirigirse a su residencia de Foros (Crimea), usted se reunió con Boris Yeltsin y Nursultan Nazarbaev para debatir el Tratado de la Unión...
- Inicialmente existió el siguiente plan: firmamos el Tratado y dentro de medio año aprobamos la nueva Constitución. Basándonos en ésta, celebramos las elecciones. Pero después de sostener debates, decidimos obrar de otro modo. Celebrar las elecciones inmediatamente después de firmar el Tratado, sin esperar la promulgación de la Constitución. Nos empujaba a hacerlo la situación de tirantez que existía en el país. Cuando la conversación empezó a girar en torno a las personalidades, Yeltsin y Nazarbaev dijeron que Gorbachev debía seguir siendo presidente de la URSS, y Yelstin, quedar a la cabeza de Rusia. En cuanto al primer ministro, propuse la candidatura de Nazarbaev, de quien yo siempre tenía buena opinión. Hablamos del relevo de cuadros, en particular de la necesidad de sustituir a Nikolay Kriuchkov (presidente del KGB), Dmitry Yazov (ministro de Defensa) y a otros. Según se supo más tarde, toda nuestra conversación fue escuchada y grabada por el KGB.

- ¿Lo de ir a Foros fue una decisión tomada por usted?
- Sí, la tomé yo. Me sentía agotado al extremo y decidí tomar un descanso de dos semanas, hasta la firma del Tratado de la Unión, fijada para el 20 de agosto. Tenía que regresar el 19. Yo no suponía que después de todo lo hecho (ya fue elaborado el programa anticrisis, preparado para la firma el nuevo Tratado de la Unión y redactado el plan de la reforma del PCUS), los adversarios de la perestroika pudiesen planear un golpe de Estado. De saberlo yo, por supuesto, no irá de vacaciones, no me moriría en esas dos semanas. Y entonces, no habría sucedido nada de aquello, le aseguro. Fue un acto aventurero. Pero en principio, el surgimiento del GKChP no fue una sorpresa para mí. La nomenclatura del partido no pasó la prueba de la democracia. Era una gente que creía que al llegar al poder, había que conservarlo hasta el final.

- Hace poco usted escribió que las condiciones de la transición hacia la democracia se dificultaron por una errónea política aplicada por los dirigentes del país en los años 1990. ¿Vincula usted esos errores con el proceder de Boris Yeltsin en persona? -
Él dio muchos pasos desatinados: asintió la desintegración del país, renunció al avance paulatino hacia la economía de mercado, la creación de nuevas instituciones democráticas y la infraestructura democrática.

- La subida al poder de usted simbolizó un viraje en la política exterior soviética y el fin de la guerra fría. En opinión de usted, ¿quién tiene la culpa de la actual agravación de relaciones entre Rusia y los países de Occidente, en primer lugar con EEUU?
- Occidente no quiso justipreciar el decisivo aporte que hizo Rusia a la conclusión de la guerra fría. Cuando Rusia se vio en una situación difícil tras la desintegración de la URSS, la empezaron a desplazar del escenario político e histórico. El Occidente industrializado quiso explotar a nuestro país que todavía no estaba adaptado para las condiciones de la economía de mercado. Apenas Rusia comenzó a levantarse, resultó que ello no le convenía mucho a Occidente. En mi opinión, los actuales dirigentes de nuestro país actúan con seriedad y de modo responsable. El Presidente no deja de dialogar con todos los Estados del mundo, y lo hace correctamente.
  • España y Rusia, separadas por la distancia y unidas por el corazón.©
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