Regreso a Stalingrado

[Mayakovski]

(...) Espero que las fotos os estén gustando...

¡Un reportaje magnífico Camarada!

El Capitán Ibárruri, sino estoy equivocado, es junto con Ramón Mercader el único español al que se le concedió el título de Héroe de la Unión Soviética.

Gracias, camarada Vladi. Buena pregunta. En el Museo Panorama hay otro español fotografiado (un tal Ventura, o Buenaventura, creo). La verdad es que mirando las fotos comienzo a tener más dudas que certezas.

Sí, puede que sólo Mercader e Ibárruri sean Héroes de la Unión Soviética. Pero habrá que consultarlo...

En efecto, me acabo de dar una vuelta por algunas páginas web y solamente Rubén Ibárruri y Ramón Mercader recibieron el título de Héroe de la Unión Soviética. Es curioso que fuesen tan pocos, teniendo en cuenta que hay cuatro ciudadanos de la RDA (un país que aún no existía durante la IIGM) con esta condecoración.

[Mayakovski]

El famoso Silo de Stalingrado, escenario de un terrible asedio por parte de las tropas alemanas durante la madre de todas las batallas. La foto con los prisioneros de la Wehrmacht desfilando por delante de este edificio es una de las imágenes más conocidas de la Gran Guerra Patriótica.



Se encuentra en la misma calle del hotel Yúzhnaya, la Raboche-Krestyanskaya, a unos veinte minutos del hotel caminando hacia el sur. Los rusos lo denominan algo así como "elevator" (por la 'elevación del grano'). Lo digo porque preguntando por los alrededores resulta sencillo de encontrar.

Nuestras fotos están hechas desde la fachada opuesta a la que se muestra en la fotografía de 1943. Nos situamos en la cara del edificio más cercana al Volga. La calle donde se encuentra el silo es paralela al río.

Su historia es muy parecida a la de la Casa de Pavlov. Un grupo de soldados del Ejército Rojo resistieron en el interior de este edificio durante un par de semanas mientras los alemanes los asediaban. Pero a diferencia de la Casa de Pavlov, en este lugar la munición se les acabó y todos los soldados acabaron muertos. Frente al edificio, inaccesible debido a un muro que lo rodea, hay una estatua de un marinero con una arma antitanque en su mano derecha. La explicación es que los defensores del silo no fueron artilleros ni miembros de la infantería: fueron marineros. Un dato histórico curioso (en Volgogrado hay río, pero no mar)

En lo alto se puede leer la famosa frase "Gorod-Soldat, Gorod-Gueroi, ....". Descubrimos el edificio una noche de exploración por los alrededores del hotel. A la mañana siguiente regresamos hasta allí pero como no llevábamos traductores hubo cierta confusión con el significado en castellano de la frase. Llegamos a la conclusión de que debe decir algo así como "Ciudad de soldados, ciudad de héroes. La batalla por la paz y el trabajo"

Junto a la frase, la medalla de Héroe de la Unión Soviética.

[Mayakovski]

Dos fotos más del silo. Junto a la enorme estatua, una corona de flores...

[rusa]

Impresionante el reportaje, Mayakovski! Lo sigo con mucho interés aunque no comente demasiado, por falta de tiempo.
La frase la habíais traducido casi perfecto: Ciudad-soldado, ciudad-héroe en servicio de la paz y del trabajo (de la labor).
Saludos cordiales!

[Mayakovski]

Impresionante el reportaje, Mayakovski! Lo sigo con mucho interés aunque no comente demasiado, por falta de tiempo.
La frase la habíais traducido casi perfecto: Ciudad-soldado, ciudad-héroe en servicio de la paz y del trabajo (de la labor).
Saludos cordiales!

Gracias, rusa, por la traducción exacta de la frase.

La verdad es que estoy disfrutando de un "segundo viaje" (mental) mientras subo estas fotografías. Me gustaría que quedase un hilo a modo de Guía Roja de Volgogrado para futuros visitantes de la ciudad. Y que otra gente aporte y rectifique informaciones. Comienzo a sentir una verdadera pasión por la historia de la Batalla de Stalingrado

Saludos!

[Mayakovski]

De Moscú a Volgogrado/Stalingrado, en tren. Una pasada, lo recomiendo encarecidamente Se trata del viaje que hizo una parte del ejército alemán durante los años 1942 y 1943, el viaje de ida y el de vuelta. El tren que sale a las 13h (desde la estación de Paveletskiy) llega a Volgogrado a las 8h de la mañana del día siguiente (de hecho, el nuestro pasaba de largo y llegaba hasta Astracán). Son 19 horas de viaje. Se trata de unos convoyes muy confortables, con compartimentos de cuatro literas extremadamente limpios y una azafata de la compañía ferroviaria encargada de cada vagón. El restaurante tiene una cocina excelente, sin lujos pero exquisita. Es una gran oportunidad para descansar, charlar durante horas (queda claro en los dos vídeos) y contemplar la inmensidad de la estepa rusa. Kilómetros y kilómetros de planicie con bosques, pueblecitos pequeños, alguna fábrica y ni una sola montaña a la vista. Y es una oportunidad excelente para ver salir el sol por el Caucaso.

Entre las 18h y las 19h aproximadamente, desde el lado izquierdo del tren se puede ver su sombra proyectada en el suelo y una puesta de sol maravillosa en el lado contrario, con unos colores verde y marrón tan saturados de luz que cortan la respiración. Realmente Rusia es una tierra muy bella.



La noche se hace larga. Pero como cada litera lleva su luz, hay tiempo para leer a Vasili Grossman (recomendable en este lugar, por supuesto), dormir lo que se pueda y escuchar el traqueteo del tren. Recuerdo que a eso de las tres de la madrugada me despertó la megafonía de una estación intermedia. Miré por la ventana y sólo pude ver un andén iluminado con una luz amarilla y las voces estridentes de un hombre y una mujer que intercambiaban información en ruso. Juro que no lo soñé, aunque esto nunca se puede decir. No sé como funciona en Rusia el tema de la comunicación ferroviaria, pero por mi experiencia me pareció muy extraña

A las siete de la mañana teníamos el cuerpo hecho trizas. Pero el té que nos sirvieron nos sentó de maravilla.



Cuando se llega a la ciudad, es posible ver, en primer lugar, la estátua de La Madre Patria llama! por las ventanillas del lado izquierdo del tren (foto 1). Luego el tren describe dos curvas pronunciadas hacia la izquierda y la derecha y la estatua vuelve a aparece por el lado derecho, en lo alto del Mamáyev Kurgan (foto 2). Es una bienvenida espectacular! La llegada a la estación (foto 3) es el colofón a una magnífica experiencia.

Para acabar, las inevitables anécdotas del viaje y algún apunte para futuros usuarios:

- TODO está en ruso, incluso los billetes electrónicos. Así que hay que espabilarse. Nos costó media hora encontrar nuestro vagón. Las azafatas se reían de nosotros, pero de buen rollo.
- Lo dicho, esos trenes se pueden reservar on-line sin necesidad de pasar por las taquillas de la estación.
- En los trenes rusos se bebe mucho. Había algunas personas que a las dos horas se tambaleaban más que el propio tren.
- La gente es extremadamente amable, acogedora, cordial. He quedado impresionado, comparado con la frialdad de las relaciones sociales en nuestro país. Un padre y un hijo nos ayudaron a escoger nuestros platos en el vagón-restaurante, nos hablaron de la excelencia de la pesca en el Volga, nos invitaron a vodkas y nos facilitaron su número de teléfono en Volgogrado por si necesitábamos algo (insistieron unas diez veces). Desde aquí, muchas gracias, amigos Quién pretenda hablar mal de la cordialidad del pueblo ruso, que me pregunte primero a mí.

Eso sí, tuvimos nuestra dosis de aventura:

- Existe la costumbre (ilícita) por parte de algunos rusos que viajan en butaca de querer dormir en litera sin haber pagado el correspondiente billete. Así que no es infrecuente que la puerta se abra por la noche y que alguien se cuele en un compartimento ocupado. Y si va muy borracho puede ser que se meta en la misma cama ocupada por uno de los pasajeros Tuvimos mucho cuidado con este tema (sencillamente, cerramos con pestillo).
- Los borrachos suelen molestar a los extranjeros, pero sin mala intención. Lo malo es que nuestro amigo de Volgogrado (el padre, una versión rusa de Clint Eastwood), le metió tal empujón a uno de estos sujetos que nos dejó atónitos y nos hizo temer que todo acabase en una especie de escena de western pero a bordo de un tren ruso. Todo esto pasó en el vagón-restaurante. Una vez el ruso bebido hubo rodado por el suelo, nuestro camarada se sentó en su mesa y nos siguió hablando a distancia de las vicisitudes de la pesca del salmón en el Volga Fue, ciertamente, un poco surrealista. El resto de la gente ni se inmutó.

Bueno, deseo un buen viaje a quién se atreva en el futuro con esta aventura!

Saludos.

[Mayakovski]

Quiero saludar desde aquí al amigo Lost Es un estudioso de la IIGM como he conocido a pocos. Recomiendo una visita pausada y completa a su fantástico hilo sobre Stalingrado: http://www.zweiterweltkrieg.org/phpBB2/ ... 00#p106000

[Mayakovski]

Hola de nuevo,

Unas cuantas personas me han preguntado sobre la posibilidad de contactar con asociaciones de veteranos de la Batalla de Stalingrado. Vayamos por partes:

- Son grupos cerrados a los cuales es difícil acceder. No se quieren mostrar como si fuesen una atracción de feria. Yo lo entiendo perfectamente porque en el mundo de los viajes hay mucho imbécil (todos lo sabéis). Así que no aparecen en guías turísticas ni medios parecidos.
- En Volgogrado hay muchas asociaciones, algunas vinculadas a otros organismos. Sobre todo a las universidades de la ciudad. Luego lo hablamos.
- Hay veteranos que forman parte de varias agrupaciones. A veces se reunen en una sede o en otra. Es un poco lioso conocer su calendario.
- De las que yo visité, ninguna tiene página web. Sólo una está en proceso de construcción de una página que explica su proyecto.
- En general, los veteranos están un poco enfadados con los medios de comunicación y con los actuales organismos oficiales. En un reciente congreso celebrado (creo) en Bulgaria, Rusia fue colocada en tercer lugar en importancia como país participante en la IIGM. Claro, con tanto sufrimiento y 25 millones de muertos, muchos veteranos decidieron cerrarse en banda.
- En la "Asociación Stalingrad" nos dijeron que Putin había declarado recientemente que "Daba gracias por haber ganado la guerra PESE a los dirigentes que hubo en aquella la época". Eso ofendió a los que participaron en la Batalla de Stalingrado. Este comentario ha hecho que otros muchos hayan echado el candado a su participación pública.

Asociaciones que nosotros visitamos:

1) Entramos en la sede la organización de veteranos que hay junto al embarcadero del Volga (en el paseo ajardinado que transcurre paralelo al río). No estaba la persona que nos interesaba ver así que visitamos una exposición que hay en la entrada y nos fuimos. Desconozco su nombre exacto, estaba escrito en una placa que hay en la entrada.

[Mayakovski]

2) Acudimos a la Asociación de Veteranos del Instituto Agrícola. De hecho, visitamos su museo porque ese día no estaba previsto entrevistarnos con ellos. El museo es pequeño, pero tiene joyas interesantes. Por ejemplo, un libro de recuerdos escrito por gente que conoció a Rubén Ibárruri. Nos permitieron fotografiarlo (página a página) y ahora está en proceso de traducción.

El Instituto Agrícola (antigua Akademia Agrícola) es la sede a su vez de los exploradores que están realizando las excavaciones. Allí conocimos a Alexei, uno de los comandantes de grupo que luego nos llevó hasta la zona excavada. El museo nos lo mostró una estudiante del Instituto y el director del centro. Contiene un montón de documentos, recuerdos (como anécdota, unas medallas religiosas que los soldados del Ejército Rojo portaban clandestinamente por debajo del uniforme), fotografías y un pequeño diorama con los rostros perfectamente dibujados de los miembros de un batallón que participó en la Batalla de Stalingrado. Entre ellos está el dibujo de la cara de Rubén Ibárruri, pese a que ya había fallecido cuando se libraron los combates que refleja la pintura. No recuerdo exactamente la denominación de ese batallón (llevaba un número, como todos), pero sí que estuvo formado por profesores y alumnos vinculados a la Akademia. A ellos se les dedica concretamente el museo.

Desde aquí, muchas gracias a toda aquella gente por su amabilidad y dedicación.

[Mayakovski]

3) Otro día estuvimos en la sede de la Asociación de Veteranos de la Facultad de Pedagogía. Quede claro que ésta es la denominación que yo le doy y que no significa que sea su nombre oficial. Digamos que ese día estuvimos en el ojo del huracán de todas las visitas porque nuestros contactos están en esa facultad. Resultó curioso ver por los pasillos de la universidad a jóvenes estudiantes junto a ancianos condecorados. Comprobé que convivían con toda naturalidad.

Ese día nos acompañó Alex, un tipo excelente y fotógrafo oficial del Museo Panorama. Un verdadero profesional de la fotografía. Sólo sabe decir una cosa en español: "No pasarán!". Pero con esto ya está dicho todo Realizó un pequeño reportaje con su cámara que espero recibir algún día. Desde aquí, saludos, amigo.

Me avergüenza decirlo pero no recuerdo el nombre de ninguno de los veteranos Con el tiempo y a medida que me escriba con la otra gente del viaje conseguiré completar todos los datos...


- En cuatro de fotos adjuntadas más abajo se puede ver a un señor con traje oscuro y condecoraciones. Estuvo en la Batalla de Stalingrado. Luego, como militar, fue destinado a las Islas Kuriles donde participó en los programas de la cosmonáutica soviética. Conoció personalmente a Yuri Gagarin

- En tres de las fotografías se puede localizar a una señora mayor, de espaldas, mientras era entrevistada en una mesa que había al fondo. Resulta incomprensible que no tenga ni una foto suya, pero bueno (confío en Alex!). Esa mujer fue enfermera durante la Batalla de Stalingrado y luego acompañó al Ejército Rojo hasta Viena (también como enfermera). Era la simpatía personificada.

- En tres fotografías aparece un hombre de pelo blanco y camisa de manga corta blanca. Fue un niño de la guerra durante la Batalla de Stalingrado. Sobrevivió a la guerra y se convirtió en un reputado historiador y arqueólogo. Muchos rusos son historiadores gracias a la vocación que les transmitió este hombre. Es una eminencia muy conocida en el país (aunque yo no recuerde su nombre )


Los veteranos de esta agrupación nos tenían preparado un tentempié con deliciosas galletas de Volgogrado. El chocolate en esta ciudad es un producto exquisito, existe una tienda que parece una nave industrial. La verdad es que me emocioné con este recibimiento. Y me emocionó también la sencillez y la humildad de su local en la universidad. Somos nosotros quienes les debemos mucho a ellos...

Desde aquí, muchas gracias a todos... Большое спасибо!

[Mayakovski]

4) Finalmente, la visita a la 'Asociación Stalingrad' (esta denominación sí que es oficial). Su sede se encuentra en la Casa de Pavlov (se entra por la izquierda del monumento que hay en la fachada). En la segunda foto se puede ver la entrada al local y, al fondo, la estatua de Lenin que hay en la Ploschad V.I. Lenina.

Ya he hablado sobre ellos. Las palabras se quedan cortas. En ese mismo sótano se libraron combates que superan nuestra capacidad de comprensión e imaginación. Ahora allí sobreviven lo últimos veteranos de la Gran Guerra Patriótica, esperando el día en qué ya no quede ninguno vivo y que todo lo que sucedió en Stalingrado sea un recuerdo escrito en los libros de historia.

[Mayakovski]

¿Cómo se puede conseguir entrevistar a los veteranos? Con paciencia, contactos y esperando que ningún político, organismo o medio de comunicación haya soltado alguna sandez sobre ellos. Como ya he dicho, ninguna asociación tiene página en internet aunque la 'Asociación Stalingrad' aparece comentada en la web del Museo Panorama.

Creo que no es cuestión de atosigar a los veteranos ni tratarlos como reliquias. Merecen todo nuestro respeto. Cualquier carta o comentario respetuoso en medios de comunicación públicos o privados os aseguro que es muy bien recibido. Nosotros les llevamos un recorte de prensa con una noticia publicada en un diario catalán sobre sus actividades. En la primera foto se ve cómo les hicimos entrega de dicho documento.

Si os puedo ayudar en algo, enviadme un privado.

Saludos!

[Siberia]

Diversos asuntos me han apartado de la web durante varias semanas, pero ahora que vuelvo me encuentro con la grata sorpresa de que has completado un magnífico reportaje. Enhorabuena J... digo Mayakovski.

No deja de sorprenderme la facilidad que tenéis para entrar en contacto con personas y lugares con los que los demás tan sólo podemos soñar. No me parece precisamente sencillo conseguir acceder a las asociaciones de veteranos y a todos esos sitios a los que ni siquiera llegan las guías de Lonely Planet. Aunque claro, yendo en grupo supongo que toda esa aventura (y locura) viajera se hará más llevadera.

Menos mal que luego nos dejáis reportajes como éste, para que al menos podamos contemplar por una estrecha mirilla todas esas cosas que siempre están tan lejos...

Y por cierto, lo del "¡No pasarán!"... es curioso como está tan popularizado entre los rusos de cierta edad, que lo entonan con un destello de ilusión en su rostro... Aunque pensando en el desdichado destino que tuvo que sufrir La República, abandonada a su suerte por unos y por otros, tantos ideales comunistas destrozados de golpe... uno ya no sabe si sonreír o echarse a llorar.

[Mayakovski]

No deja de sorprenderme la facilidad que tenéis para entrar en contacto con personas y lugares con los que los demás tan sólo podemos soñar. No me parece precisamente sencillo conseguir acceder a las asociaciones de veteranos y a todos esos sitios a los que ni siquiera llegan las guías de Lonely Planet. Aunque claro, yendo en grupo supongo que toda esa aventura (y locura) viajera se hará más llevadera.

Amigo Siberia,

Yo a este viaje fui de acompañante, así que los contactos ya estaban creados. Sin embargo, he podido aprender la meotodología para inflirtarse en grupos de interés: un traductor (si no hablas ruso) y mucho morro.

El que organizó este tinglado había estado en Volgogrado hace cinco años. Y ya entonces funcionó de esta forma. Se metió por todas partes y se hizo entender con ayuda de la traductora que habia contratado. Lo enviaron a hacer puñetas unas cuantas veces pero en un día un estudiante de la universidad lo oyó hablar en español por casualidad y le presentó a una profesora de pedagogía. Ahí comenzó todo...

Ya sabes... ruso + mucho morro (y educación, claro)

saludos!

[Mayakovski]

El Museo dedicado a Stalin en el Mamáyev Kurgan. Se trata de un pequeño museo creado y financiado por Vasily Bukhtiyenko, millonario ruso que, por cierto, fue asesinado el año pasado. Nos explicaron la historia de la muerte de este hombre unas cuantas veces (muy macabro ). El museo se encuentra detrás de la estatua gigante del Mamáyev Kurgan (mirándola desde el Volga), junto a un aparcamiento y un restaurante llamado "Blindado" o una cosa parecida (el cajero del bar va vestido de soldado del Ejército Rojo ).

La noticia de la muerte de Bukhtiyenko se puede leer, por ejemplo, en Asesinan brutalmente a un empresario ruso que abrió un museo dedicado a Stalin